En el marco de “Día Internacional de las personas sin hogar” para Promover el Respeto sus Derechos Humanos.
Con la entrega de alimentos y bebidas a personas en situación de calle o sin hogar que se encuentran en diferentes puntos de la Capital Queretana, así como de personas de escasos recursos que se quedan a dormir a las afueras de los hospitales mientras atienen a algún familiar enfermo, más de 40 jóvenes voluntarios y de servicio social Vive México en Querétaro comenzaron sus actividades en el marco del “Día Internacional de las personas sin hogar”, que se realiza cada 28 de noviembre para sensibilizar y crear consciencia entre la población sobre la importancia de ayudar a las personas en situación de calle, entre las cuales se encuentran mujeres, adultos mayores, personas con discapacidad y muchas otras personas en situación de vulnerabilidad que requieren de apoyo para salir adelante de esa difícil situación.
“El 28 de noviembre no sólo nos invita a recordar la difícil situación que atraviesan las personas en situación de calle, sino que además nos convoca a toda la ciudadanía, los gobiernos y la sociedad a unir esfuerzos para que los derechos humanos de estas personas en situación de vulnerabilidad y discriminación sean respetados”. Afirmaron varios de los jóvenes de Vive México en Querétaro entre los cuales destacan estudiantes del Instituto Tecnológico de Querétaro (ITQ), la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), la Universidad Tecnológica del Estado de Querétaro (UTEQ).
“Cuando nos acercamos a compartir los panes, tortas, café y atole a las personas en situación de calle o sin hogar, descubrimos que existen muchos motivos por los cuales las personas llegan a esta terrible situación y al mismo tiempo nos damos cuenta que no somos quien para juzgar a la gente, pues independientemente de los motivos por los que hayan caído en las garras de las calles, todas las personas tienen derechos humanos y deben tener la oportunidad de que se les ayude a salir de ahí, para tener una mejor calidad de vida. Deberían tener el apoyo de los gobiernos y de la ciudadanía, por eso estamos aquí rompiendo con esa indiferencia hacia ellos, queremos que sepan que no están solos y que un día podrán lograr su reinserción a la sociedad. Por lo anterior, esperamos que los gobiernos y legisladores impulsen políticas públicas incluyentes que garanticen los derechos humanos de este sector de la población que sigue siendo afectado por la indiferencia y la discriminación”. Afirmaron Ana Olalla Ramírez Guerrero estudiante de Arquitectura del ITQ y Jaydar Antonio Magaña Sandoval estudiante de Gestión y Desarrollo de Empresas Sociales de la UAQ, quienes realizan su servicio social en la organización internacional Vive México en Querétaro.
Durante su recorrido por diferentes instancias de salud pública y lugares en donde habitualmente se ubican personas en situación de calle, los jóvenes comentaban que lo que más les gustaba de realizar esta labor altruista a favor de los más necesitados, era ver como el rostro triste de las personas se iluminaba con una sonrisa cuando se acercaban a ellos para compartirles alimentos y escuchar sobre sus experiencias de vida donde les indicaban porque se encontraban en esa triste situación.
Al concluir su actividad, los jóvenes se reunieron y compartieron los momentos más emotivos de su experiencia, en la cual reflexionaron sobre la importancia de aprender a valorarlos y apoyarnos como seres humanos sin importar las diferencias o al situación en la que nos encontremos. Por eso, recordaron emocionados algunas de las frases que las personas a las que apoyaron les compartieron, como las siguientes:
“Ustedes los jóvenes son el presente y futuro del mundo, afortunadamente con estas acciones que realizan, nos dan esperanza de que un día las cosas pueden mejorar y nos motivan a seguir echándole ganas”.
En el mismo sentido, otra de las personas que se encontraba a las afueras de un hospital público (sin recursos, ni comida) esperando saber de la salud de su familiar le comentó al recibir los alimentos de parte de los jóvenes:
“Son ustedes unos ángeles, gracias de todo corazón por ayudarnos”. Finalizaron de contar las experiencias que vivieron al ayudar a los más necesitados.