LA VIOLENCIA NOS ALCANZÓ
POR: HÉCTOR PARRA RODRÍGUEZ
Jueves 13 de abril de 2017.- Tres homicidios acaecidos en un solo día, el martes la violencia se volvió a hacer presente en el otrora tranquilo Querétaro.
Que si por riña, que si fue ejecución, que si no pagó la cuenta, que pleito entre pandilleros, lo cierto que conforme ha crecido poblacionalmente nuestro Estado, la violencia ha crecido en la misma proporción ¿Nos ha tomado por sorpresa la violencia? Parece que sí.
Entiendo que resulta muy complicado prevenir actos de violencia u otros ilícitos como el robo, entre otros; sin embargo para nadie es desconocido la existencia de cámaras que coadyuvan, al menos, a detectar a los delincuentes y las zonas criminógenas ¿Entonces por qué no comprar y comprar más y más cámaras que coadyuven en la vigilancia, prevención y persecución de los delincuentes?
Las autoridades han preferido invertir cantidades millonarias en obras de ornato, antes que prevenir la delincuencia. Para nadie tampoco es desconocido que nuestro Estado ha caído en manos de la delincuencia organizada, que distribuyen distintos enervantes para el consumo masivo. Por doquier se comenta y se puede conseguir la droga. La distribución de la droga a pie es múltiple, se da en tienditas, en escuelas, en bares, etcétera; se puede vender y comprar a discreción.
Se rumora que la plaza está distribuida entre varios carteles y cuando se invaden territorios, vienen las ejecuciones.
Y así podemos saber con claridad lo que sucede a diario en las calles de Querétaro. Vamos, se han localizado en diversas ocasiones laboratorios en los que se procesa la droga; en el mismo aeropuerto internacional se ha logrado detectar droga. Y no hay detenidos o si los hay solo son los narcomenudistas, de las grandes cabezas nada se sabe.
No es justo lo que nos está pasando. Nuestra sociedad provinciana y tranquila ha cambiado y mucho. Se dice que no hagamos caso de las provocaciones de tránsito dado que la violencia está incontrolable y un simple incidente puede terminar en algo fatal ¡No los enfrentes! Es la recomendación. Sobre todo a los vehículos con placas de otros estados que son los más agresivos. Y el queretano no tiene otro remedio que guardar la calma.
¿Cámaras de video-vigilancia? No las hay y si acaso existen, algunas de ellas son viejas, otras descompuestas, así que las que están en funcionamiento no alcanzan para reforzar la seguridad, sobre todo de la zona metropolitana. Nadie desconoce que entre más población existe, más riesgos correrán los vecinos del ligar que crece sin control.
Querétaro sigue siendo un atractivo para invertir y generar empleos, eso atrae gente de otros estados, buena y mala; es un destino turístico importante que también genera muchos ingresos, movimiento importante de dinero. De tal manera que el caldo de cultivo para la delincuencia es de lo más apetecible.
Aún estamos a tiempo de contener el incremento de la violencia, en preciso detenerla antes de que rebase a las autoridades; los queretanos no merecen ser rehenes de los delincuentes.
Consecuentemente, se hace necesario invertir mucho más en sistemas de prevención de actos delictivos, incrementar la seguridad con medidas disuasivas efectivas; es urgente paralizar, suspender, atascar a los delincuentes y erradicarlos antes de que echen raíces y hagan suyo el Estado, como ha sucedido en otros lugares.
Las autoridades tienen la obligación de atracar a los delincuentes y no solo sus consecuencias. Una medida, entre otras, es el fortalecimiento en la video-vigilancia, para dar mayor seguridad a los queretanos; eso antes que obras millonarias de ornato. La misma autoridad municipal ha reconocido y los legisladores otro tanto, el aumento del índice delictivo, por eso autorizaron a los colonos para construir casetas de vigilancia y así contener a los delincuentes. No esperemos a que nuestros policías se vean rebasados, comprados o intimidados por los delincuentes. Estamos muy a tiempo.