TRAS LA VERDAD
POR HÉCTOR PARRA RODRÍGUEZ
Lunes 31 de agosto de 2020.- ¿Podrá López Obrador decir algo positivo en el segundo informe del estado general que guara la administración pública federal? ¡Nada positivo! Objetivamente será un informe superfluo. Ahora que, de acuerdo a sus propios datos todo lo que informe serán inventos y mentiras, algarabía presidencial de todos sus fracasos, terrible situación en la que ha mentido a millones de mexicanos por sus políticas populistas. Intencionalmente lleva, ahora sí, directo y sin escalas al “despeñadero” a toda la nación mexicana.
Prometió demasiado. Como todos los abusivos que viven de la política, solo buscan allegarse votos para usufructuar el poder público. En dos años de gobierno lopista, nada bueno podrá informar que no sean inventos surgidos de una mente enfermiza de poder. Sus caprichos antes que la Nación Mexicana. Un hombre que vive en los tiempos de los años setentas, donde adquirió toda su pésima experiencia en política, a fin de cuentas, hijo putativo de Luis Echeverría Álvarez y López Portillo. Los derroches fueron y son la característica principal que ha distinguido a este y aquellos gobiernos. Hubo quien dijo que “defendería al peso como perro”, lloró en tribuna; no cumplió. Hoy se repite la historia, Andrés Manuel dijo que superaría en todo a sus odiados contrincantes neoliberales y corruptos, ha sido todo lo contrario. Vaya que lo está consiguiendo, pero en sentido negativo, destruye al país.
Prometió incrementar el PIB arriba de sus competidores. Lo bajó a más del 100 por ciento. Prometió crear más empleos, hace lo opuesto. Ha destruido la planta laboral no solo con la desaparición de fuentes de empleo, incluso su gobierno despidió a miles de trabajadores; en tiempos de pandemia no ha soltado un solo peso en apoyo de los trabajadores, más de 10 millones de empleos se han perdido y López no se inmuta.
Ofreció bajar el índice delictivo. La realidad es otra, los delitos se dispararon; incluso prometió con “abrazos” acabar con la delincuencia organizada, no lo ha conseguido, a esos delincuentes los convirtió en sus aliados y saluda de mano a familiares de los más grandes delincuentes en México, a otros los libera. Reformaron la Constitución para darle más poder en el uso de las fuerzas armadas, creó su Guarna Nacional, los resultados continúan siendo catastróficos.
Dijo que acabaría con la corrupción “institucionalizada”, que barrería escaleras de “arriba para abajo” para eliminar la corrupción. Sucedió lo contrario, se ha desvelado que su equipo (de López Obrador) es igual o más corrupto que aquellos que prometió combatir; incluso su familia forma parte de esa corrupción. Como nunca, asigna obras directamente a sus amistades, sin licitaciones; se crearon nuevas empresas para darles obras públicas. Disimulando el combate, ha fortaleció la corrupción. Los responsables de combatirla, se protegen entre ellos, simulan juicios, absuelven o condenan según sus intereses políticos. Vamos, la responsable de aplicar la justicia administrativa no tiene conocimientos en Derecho, eso se llama corrupción.
Ofreció mejorar el sistema de salud. Para ello eliminó el Seguro Popular, el que, aun con sus deficiencias funcionaba. Formó su nuevo sistema de salud denominado Insabi, el cual sería como los mejores del mundo, esa fue su publicidad política. Desde entonces, el nuevo sistema de salud colapsó, no hay medicinas, no hay insumos, despidió a cientos de empleados del sector; quitó enormes presupuestos económicos a todo el sistema, lo denunció Germán Martínez, todo para llevar ese dinero a sus proyectos de obras inútiles y costosas. Los fallecimientos ocasionados por la pandemia es el ejemplo terrible de ello, más de 60 mil muertos, México en tercer lugar a nivel mundial de infectados y fallecidos; diario más muertos e infectados, lamentablemente las cifras seguirán en aumento.
También prometió que habría mayor inversión y presumió que, con el T-MEC, lloverían los dólares en inversión extranjera. Tampoco ha cumplido, los capitales dejaron de ingresar a México y no precisamente a causa de la pandemia; no, la razón principal radica en la inseguridad pública y la inseguridad jurídica, dos elementos fundamentales para invertir y que no los garantiza el gobierno de federal. El gobierno lopista no respeta el Derecho y vulnera a su antojo contratos previamente suscritos, suspende construcción de obras millonarias. López Obrador ahuyenta los capitales nacionales y extranjeros, resultó un depredador.
El mayor presupuesto público nunca antes aprobado a gobiernos neoliberales, no le ha sido suficiente al gobierno de López. Ha tenido que hacer uso de las reservas económicas de los mexicanos de miles de millones de pesos y ni así le alcanza el dinero para sus locas “francachelas”. 6 billones, 107, 732.4 miles de millones de pesos, no le han sido suficientes. Estados y municipios también resienten los recortes. Ha seguido con disminuciones al presupuesto para acumular más dinero a su disposición y no le alcanza. Rifa ilusiones para obtener más dinero, extorsiona a empresarios, la Fiscalía le da dinero, reduce el salario a empleados, quita aguinaldos, concentra el 75 por ciento del gasto de todas las dependencias, elimina estructuras administrativas, nada es suficiente para las ambiciones económicas del Presidente de la República. Conforme avanza el tiempo, la situación empeora.
Frente a tremenda y probada ineptitud, populismo exacerbado, maldad para gobernar, el Presidente López, cual circo de cinco pistas, entretiene al pueblo con mentiras, falsas rifas, acusaciones sin sustento, denuncias de procesos penales en curso, ofensas, amenazas, calumnias a sus adversarios, censuras a la libertad de expresión. Dos horas diarias de mentiras en sus conferencias mañaneras durante todo el tiempo que lleva al frente de la nefasta administración que encabeza.
¿Qué de positivo podrá informar López Obrador, este primero de septiembre, fecha del segundo informe del estado general que guarda la administración pública federal? ¡Nada! ¡Volverá a ser un cúmulo de mentira y culpas a terceros de sus fracasos! Ese será el contenido de todo lo que informe ante el Congreso de la Unión. Mientras tanto, crece la inconformidad ciudadana en contra del informante, cada vez más mexicanos se suman a la petición de renuncia de Andrés Manuel López Obrador. Como contraofensiva, en pleno inicio del proceso electoral, echa andar su maquinaria electoral para, según él, a petición del pueblo, enjuiciar a los expresidentes de la república. Mucho circo y sin pan en la mesa de millones de mexicanos.