Es importante tener estilos de vida saludables.
La Secretaría de Salud (SESA) de Querétaro se une a la conmemoración del Día Nacional Contra el Cáncer de Pulmón, cada 5 de abril, con el objetivo de concientizar a la población sobre esta enfermedad y sus implicaciones, por lo que es fundamental seguir promoviendo la prevención, la detección temprana y la adopción de hábitos saludables para reducir la incidencia y mortalidad asociadas.
Este tipo de cáncer es un importante problema de salud pública, y causa un gran número de muertes en todo el mundo. Las estimaciones de GLOBOCAN 2020 relativas a la incidencia de los distintos tipos de cáncer y las tasas de mortalidad conexas, que elabora el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC), muestran que el cáncer de pulmón sigue siendo la principal causa de muerte por cáncer.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) informa que el tabaquismo es la causa principal del cáncer de pulmón y es responsable de aproximadamente el 85% de todos los casos.
Fumar tabaco (incluidos cigarros, puros y pipas) es el principal factor de riesgo en el caso del cáncer de pulmón, pero también puede afectar a los no fumadores. Otros factores de riesgo incluyen el tabaquismo pasivo, los peligros ocupacionales (como el amianto, el radón y determinados productos químicos), la contaminación atmosférica, los síndromes de predisposición hereditaria al cáncer y las enfermedades pulmonares crónicas previas.
Entre los factores también se encuentran aquellos relacionados con la contaminación intramuros, como la aspiración de humo de leña, el bajo consumo de antioxidantes, alguna afección previa del pulmón debido a bronquitis, tuberculosis, fibrosis o enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).
Entre los síntomas más comunes se encuentran: tos persistente, dolor torácico, disnea, tos con sangre (hemoptisis), cansancio, pérdida de peso sin causa conocida, infecciones pulmonares que siguen reapareciendo. Los primeros síntomas pueden ser leves o descartarse como problemas respiratorios comunes, lo que retrasará el diagnóstico.
Se recomienda reducir los factores de riesgo que causan la enfermedad y llevar un estilo de vida saludable:
- No fumar tabaco.
- Evitar permanecer en lugares donde las personas tienen el hábito de fumar.
- Alimentación saludable: que incluya frutas y verduras.
- Actividad física: realizar al menos 30 minutos al día.
- No estar en contacto con productos químicos tóxicos, agentes contaminantes o radiación.