La Secretaría de Salud del estado de Querétaro da a conocer información sobre las picaduras de alacrán y emite recomendaciones para evitarlas.

Los alacranes, son animales nocturnos, resisten a condiciones físicas adversas, suelen encontrarse en lugares húmedos y tranquilos como la corteza de los árboles, grietas, paredes, bajo piedras, escombros, ladrillos, maderas, etc.
El veneno de estos animales, es una mezcla de toxinas de las que sólo algunas ocasionan envenenamiento, el cual puede ser leve o mortal en los humanos.

En México las especies de alacrán, de importancia médica, pertenecen al género Centruroides. En Querétaro se encuentra la especie Centrurus límpidus de alta toxicidad, principalmente en los municipios de Querétaro, Corregidora, Huimilpan y El Marqués, aunque también se han encontrado en Colón, Peñamiller y Cadereyta.

Al sufrir una picadura de alacrán, los síntomas se presentan desde los primeros minutos hasta las dos horas de la picadura, pueden ser locales o generales y no necesariamente siguen un orden. También dependen de la especie, tamaño y etapa de desarrollo del arácnido y de la cantidad y calidad del veneno inoculado; así como de la edad, peso corporal, estado de salud y sensibilidad del paciente.

Según los signos y síntomas que experimenta el paciente, la intoxicación se puede clasificar en leve, moderada y severa. La intoxicación leve incluye dolor en el sitio de la picadura, adormecimiento y prurito (comezón) en nariz y garganta. La moderada, además de lo anterior, llega a causar uno o más de los siguientes síntomas: salivación abundante, adormecimiento general, inquietud, distensión abdominal, fasciculaciones linguales (contracciones en la lengua), dificultad para respirar.

Por otro lado, la intoxicación grave se caracteriza por los síntomas de la intoxicación moderada más sensación de cuerpo extraño en la garganta, dificultad para enfocar, lagrimeo, visión de halos rojos, convulsiones, vómito, ceguera transitoria, hipertensión arterial, fiebre, adormecimiento facial, dificultad para orinar, taquicardia y en casos más severos, bradicardia y edema pulmonar agudo, pudiendo llegar a ser mortal.

El tratamiento consiste en la aplicación oportuna de Faboterápico Polivalente Antialacrán.

En la Secretaría de Salud, la demanda de atención médica por picadura de alacrán se da principalmente en el Hospital General de Querétaro, en el Hospital de Especialidades del Niño y la Mujer y en los centros de salud de la Jurisdicción Sanitaria número 1, en esta última se registra alrededor de 96 por ciento de los casos. Con menor frecuencia se presentan caso en los hospitales generales de San Juan del Río, Cadereyta y Jalpan.

En 2016 se atendieron en las instituciones del sector público en salud a 4 mil 864 personas con picadura de alacrán, y hasta la semana epidemiológica 8 del presente año, se han registrado 399 casos, de acuerdo con el Sistema Único de Información para la Vigilancia Epidemiológica (SUIVE).

Las acciones que realiza la dependencia estatal para disminuir casos de picadura de alacrán, consisten en la difusión de medidas preventivas e informar sobre la importancia de la atención oportuna.

Asimismo, en las zonas de alta endemia en el 2016 se visitaron 2 mil 499 viviendas, las cuales se fumigaron y dejaron mensajes de prevención y promoción de la salud.

Entre las medidas preventivas para evitar picaduras de alacrán, se encuentran:

  • Colocar mosquiteros en puertas y ventanas
    • Revisar y sacudir la ropa antes de ponérsela.
    • Revisar ángulos de las paredes, puertas y ventanas.
    • Resanar y aplanar techos, pisos y paredes.
    • Colocar protección en puertas, ventanas y techos.
    • Utilizar pabellones en camas y cunas, y sumergir las patas de las camas dentro de recipientes con agua.
    • Separar las camas y cunas 10 centímetros de la pared.
    • Eliminar cúmulos de basura, piedras y madera alrededor y dentro de la casa. Cortar la hierba alrededor de la casa.
    • Usar guantes de carnaza para realizar trabajos del campo que representen riesgo de picadura de alacrán.
    • No caminar descalzo, no dejar ropa en el piso, no levantar piedras, tabiques o bultos sin precaución.

ANTE LA PICADURA DE ALACRÁN, SE DEBE SOLICITAR ATENCIÓN INMEDIATA Y NO AUTOMEDICARSE.

 

 

 

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