Fiebre, ardor al orinar y dolor en general algunos de los síntomas
El tratamiento puede mejorar el estado de salud en uno o dos días
La prostatitis, explicó especialista del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Querétaro, es una inflamación aguda de la próstata provocada en la mayoría de los casos por un proceso infeccioso que se adquiere en vías urinarias o vía sanguínea retrógrada.
Los síntomas se pueden presentar de la noche a la mañana y pueden iniciar con un cuadro de irritación para orinar como si fuera infección en las vías urinarias, problemas para que el chorro salga, ardor, sangrado y ataque al estado general, es decir, calentura, dolores articulares y un mal estado general del cuerpo muy parecido al malestar que ocasiona un resfrío, comentó el doctor René Zamora Varela, urólogo del Hospital General Regional No. 1.
Afirma que estos síntomas no desaparecen solos o tomando remedios caseros, es necesario tomar medicamento para corregir la infección y relajar la próstata y aunque la mejoría en el estado de salud puede sentirse uno o dos días después de tomar la primera dosis, deben pasar al menos cuatro semanas con antibióticos para poder erradicar por completo la enfermedad.
El especialista del Seguro Social mencionó que otro de los síntomas característicos de la prostatitis, es cuando el paciente siente ardor al momento de eyacular cuando tiene relaciones sexuales, esto debido a la inflamación de la glándula prostática.
“La enfermedad no necesariamente se adquiere por contacto sexual, lo que causa el problema a nivel próstata son bacterias que se pueden encontrar en la vía urinaria. La prostatitis no es necesariamente una enfermedad de transmisión sexual o contacto sexual temprano o frecuente”, indicó Zamora Varela.
“Si el paciente no es atendido por un médico que le dé el tratamiento adecuado puede tener complicaciones importantes, la principal es que se forme un absceso peri prostático y la infección se extienda hacia afuera de la próstata”, indicó Zamora Varela.
El Instituto exhorta a los derechohabientes que tengan estos síntomas a que acudan a su Unidad de Medicina Familiar (UMF) para que el médico los revise y les prescriba el tratamiento necesario, así como culminarlo para evitar que la enfermedad regrese.