Viernes 18 de noviembre del 2016.- Si no pueden renuncie pero no traiga sus problemas a Querétaro, es lo menos que le dicen al actual presidente municipal de Cadereyta el ex diputado León Enrique Bolaño.
Es manifiesta su incapacidad porque no solamente es una cuestión de dinero sino de voluntad, ya basta con eso de que “ME DEJARON UN COCHINERO”, a todos no solamente a usted alcalde. Lo que no se vale es que los trabajadores a los que les prometió su liquidación estén plantados frente a Palacio de Gobierno queriendo endilgar el problema a la administración de Pancho Domínguez.
Por eso decimos que si no hay capacidad mejor renuncie y deje a quien tenga voluntad de arreglar los problemas, para eso le pagan y muy bien para que dé soluciones no para que transfiera los conflictos. Lo que no se vale nunca y menos en estos tiempos es nadar de muertito o llegar a calentar la silla; no, se le paga para que dé soluciones y resuelva.
Salvo Querétaro que se cocina aparte por los ingresos propios, los 17 restantes todos tienen problemas económicos y presupuestales, eso ya lo sabemos, lo que en la administración pública no se perdona es la indolencia y la falta de voluntad política para mediar o solucionar.
Dicen que Cadereyta le quedó muy grande y al parecer es verdad, de otra manera no se explica que haya dejado crecer el problema a estas alturas, como legislador nadie lo cuestiono porque creen que lo saben todo, pero ahora en la administración pública debe asumir su responsabilidad y dar soluciones, además lo prometió en campaña que es lo peor una promesa que se la quiere transferir a otros,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,
A nadie nos gusta pero es necesario y ya es un hecho, el predial va a subir y no es para espantarse por eso digo que no nos gusta que nos incrementen los costos de los servicios públicos, pero de otra forma no hay viabilidad en el funcionamiento de la administración pública.
Lo que si pedimos los ciudadanos es que mejoren los servicios que no empeoren y hay ejemplos de cómo servicios muy eficientes han visto a caer en la mediocridad, antes hasta premios internacionales hoy ni a escoba de bronce.
Rondará el 4 o 5 % de incremento pero ya es una realidad y no debe espantar, hay que pagar y exigir que los servicios públicos, bueno al menos los que no estén concesionados sean de mejor calidad y eficiencia, menos papeleo menos tramites y menos burocratismo, agilicen y eficiente su función que para eso les pagamos.. a poco no.