·      Puede ser de origen genético o adquirido.

·      Se debe mantener la calma ante una crisis convulsiva.

El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Querétaro informa que hasta un 40% de consultas del servicio de Neurología que son atendidas en el Instituto son casos de epilepsia y se logra el control de la enfermedad, permitiendo a las y los derechohabientes recuperar su calidad de vida.

Gabriela Tafoya Arellano, neuróloga adscrita al Hospital General Regional (HGR) No. 2, explicó que la epilepsia es una enfermedad que se caracteriza por una descarga eléctrica del cerebro y tiene presencia de signos neurológicos anormales de tipo motores, sensitivos autonómicos o psíquicos que produce convulsiones recurrentes.

Destacó que las causas pueden ser genéticas y tienden a presentarse desde la infancia, además pueden ser de tipo adquiridas; generalmente secundarias a lesiones cerebrales, tumores, infección parasitaria por cisticercos, o infartos cerebrales.

Señaló que su diagnóstico es a través de datos clínicos inicialmente, además de realizarse estudios tales como tomografías, resonancias magnéticas y electroencefalogramas para detectar una descarga eléctrica anormal del cerebro.

“La epilepsia es una de las causas más frecuentes de las consultas en Neurología. Después de la cefalea, es la segunda causa de consulta, llegando a ser de hasta un 40% de atención a este padecimiento”, indicó la especialista.

Mencionó que las manifestaciones de una crisis convulsiva pueden iniciar con un periodo de aura, que es la parte de las crisis que acontece antes de la pérdida de conciencia y, generalmente, inicia con síntomas gastrointestinales, sensación de mareo, adormecimiento o movimientos involuntarios en alguna parte del cuerpo.

Agregó que dichos movimientos involuntarios llegan a generalizarse y posteriormente puede haber convulsiones, pérdida del estado de alerta, cambios en la coloración de los labios, y riesgo de lesionarse.

“Las crisis convulsivas van a tener, generalmente, una duración que pueden ir de segundos, otros se extienden a uno o dos minutos. Sin embargo, cuando una crisis dura más de cinco minutos se podría estar presentando un estado epiléptico, por lo que se recomienda acudir a atención médica de urgencias”, explicó Tafoya Arellano.

La manera adecuada de reaccionar ante una crisis convulsiva en donde se pierda el estado de alerta es mantener la calma. Debe colocarse al paciente de lado, no introducir objetos –ya que pueden obstruir la vía aérea-, aflojar la vestimenta en el área del cuello y llamar a servicios de emergencia en caso de que tenga una duración mayor a cinco minutos.

Finalmente, la especialista exhortó a la población a estar atenta ante la presencia de uno o más síntomas y solicitar atención médica oportuna, a fin de realizar el diagnóstico temprano e iniciar tratamiento lo antes posible.

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