Importante el fomentar estilos de vida saludables.

La Secretaría de Salud del estado de Querétaro se unió en días pasados a la conmemoración del Día Mundial de la Salud Digestiva, cuyo objetivo se centra en promover la salud digestiva y difundir el conocimiento de los desórdenes digestivos.

El Día Mundial de la Salud Digestiva es una iniciativa promovida por la Organización Mundial de Gastroenterología, la cual, considera que la salud digestiva requiere la presencia suficiente de nutrimentos como la fibra y el agua, así como el consumo de probióticos que favorezcan la flora intestinal y la actividad física diaria.

La fibra es un nutriente de origen vegetal y está constituida por celulosa, hemicelulosa y carbohidratos. Nuestro organismo no puede digerirlas ni absorberlas, por lo que al pasar por el tubo digestivo barre con todos los desechos formados, los cuales se eliminan a través de las heces.  Los alimentos que contienen fibra son: cereales integrales (avena, y trigo con grano entero), verdura cruda (espinaca, apio, jitomate), fruta con cáscara (manzana, pera, uvas) y oleaginosas (nueces, almendras, cacahuates).

El agua es una gran herramienta que favorecer el proceso de digestión, ya que, entre otras funciones, se encarga de diluir los nutrientes de los alimentos y transportarlos a las células, asimismo ayuda a transportar los deshechos del organismo. Lo recomendable es beber 1.5 a 2 litros de agua al día; la cantidad puede variar dependiendo de factores como la edad, el estado de salud o si practican actividades deportivas. El agua juega un papel fundamental en todo nuestro organismo, no solo en el proceso de la digestión.

Estar hidratados es importante para que nuestro cuerpo funcione de forma correcta.

Los probióticos son una saludable y beneficiosa fuente de bacterias que ayudan a mantener regulada y balanceada la flora intestinal. Diversos estudios han descubierto que los probióticos tienen grandes beneficios como: ayudar a digerir la comida, asisten en la absorción de nutrientes, regulan la flora intestinal, previenen ciertos tipos de cáncer, especialmente el de colon, entre otros.

Los probióticos se encuentran en productos fermentados como el yogur descremado y jocoque; cualquier de estos sin azúcar pueden acompañar al cereal integral, fruta, o bien ser el aderezo para las ensaladas.

La actividad física tiene diversos efectos positivos en la salud del organismo, sin embargo, su práctica es esencial para la digestión ya que incrementa el metabolismo, por lo tanto, acelera los procesos digestivos evitando la sensación de pesadez tras las ingestas y educiendo el riesgo de sufrir estreñimiento.

El ejercicio también favorece los movimientos intestinales, con lo que beneficia el tránsito intestinal y previene el estreñimiento. Además, reduce el estrés y los malestares digestivos asociados.

Se debe realizar al menos 30 minutos de actividad física diaria, para activar el funcionamiento digestivo y favorecer la evacuación.

 

 

 

 

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