• Candidatas y candidatos deben mostrar su respeto al derecho constitucional a la no discriminación, a través de la presentación de propuestas para prevenir y erradicar dicho fenómeno social que vulnera la dignidad humana.

“La homofobia que existe en México ocasionó la discriminación de las demandas de la diversidad sexual en las campañas electorales. Los partidos políticos realizaron coaliciones o alianzas con el acuerdo de dejar fuera de sus propuestas políticas y debates electorales las demandas y derechos de la diversidad sexual. Entonces, si las demandas de homosexuales, lesbianas, bisexuales, transgéneros, transexuales e intersexuales no están en las plataformas de los partidos políticos, en sus propuestas de campaña o en los debates electorales, mucho menos estarán en las legislaciones o sus programas de gobierno y eso es claramente un acto de discriminación generado por la homofobia, que al mismo tiempo ha generado que en este país no se respete ni se garantice el derecho constitucional a la no discriminación. De ahí la importancia de que las y los candidatos muestren su respeto al derecho constitucional a la no discriminación, a través de la presentación de propuestas para prevenir y erradicar dicho fenómeno social que vulnera la dignidad humana, así como los derechos humanos y constitucionales de la ciudadanía”. Así lo manifestó el Mtro. Manuel Edmundo Ramos Gutiérrez presidente de SOS Discriminación Internacional Querétaro la tarde del 17 de mayo “Día Internacional contra la Homo-Lesbo- Bi- Trans- Fobia”, durante la mesa de diálogo que realizó la Defensoría de los Derechos Humanos de Querétaro en las instalaciones del Museo de la Ciudad con el fin de promover el respeto integral de los derechos humanos sin importar las diferencias.

Durante el diálogo conmemorativo de no discriminación y a favor de los derechos humanos de la diversidad sexual, Bernardo Romero Vázquez, Coordinador del Programa Universitario de Derechos Humanos de la Universidad Autónoma de Querétaro  (UAQ) recordó y lamento el crimen de odio por homofobia del activista Octavio acuña ocurrido en nuestra entidad en 2005, mientras que Inés Acevedo Espinosa compartió el viacrucis que tuvo que enfrentar en los tribunales de justicia para lograr que el IMSS le diera  la pensión de su esposa que falleció poco tiempo después de casarse y que le negaron principalmente por ser una pareja de adultas mayores lesbianas.

Así mismo la y los participantes de la citada mesa de diálogo lamentaron que México en la actualidad siga ocupando el segundo lugar en crímenes de odio por homofobia después de Brasil en América Latina y que de acuerdo con estadísticas del Consejo Nacional para Prevenir y Eliminar la Discriminación más del 50% de las personas encuestadas mencionaron que no vivirían con un homosexual bajo el mismo techo.

También mencionaron cifras de la investigación “Atención a Personas LGBTTI) en Querétaro” que realizó en 2017 la Fundación Arcoíris con la coordinación de la académica de la UNAM, Gloria Careaga, en la cual se reveló que en Querétaro el grupo por identidad de género que ha sufrido más agresiones físicas son las mujeres transgéneros o transexuales, con un 42.86% . Seguido de personas intersexuales con 33.33% y de los hombres con el 29.63%. Los responsables de dichas agresiones son personas desconocidas, seguido de familiares y policías.

Además de que debido a la homofobia y la discriminación que sufren las personas de la diversidad sexual entre 25 y 34 años, han tenido que huir hacia la Ciudad de México porque 5 de Cada 10 personas LGBTTI han vivido acoso, discriminación u hostigamiento dentro de sus espacios laborales. Por ello, 4 de cada 10 ha tenido que ocultar su condición LGBTTI en el trabajo. Mientras que el ámbito educativo, los resultados destacan que la secundaria, es el nivel donde las personas perciben mayores niveles de discriminación con un 28.81%.

Finalmente, la titular de la Defensoría de Derechos Humanos de Querétaro destacó la importancia de fortalecer la promoción y educación de los derechos humanos en todos los ámbitos de la sociedad para garantizar que ninguna persona sea violentada o discriminada a causa de su preferencia sexual o cualquier otro motivo.

 

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